Las expectativas de cara a la exposición son razonablemente buenas, siempre que no se produzca un cambio radical del tiempo en los próximos dias. En Asturias las setas empiezan a salir y en León lo hacen con profusión. Los ánimos, a pesar de que ya tenemos 24 añitos más que cuando hicimos la primera exposición, siguen intactos, así que por nosotros no va a quedar y esperamos que sea del agrado de los numerosos aficionados que nos visitan cada año.
Seguiremos incidiendo en la sistemática que ya conocen los aficionados, empezando por la primera mesa de la derecha con las setas con poros, los Boletales, a continuación, las setas con láminas, las Russulales primero, setas que parten como la tiza y, a continuación, todas las demás setas con láminas, de esporada clara a más obscura, terminando con las Agaricales en la segunda mesa de la derecha. En la última mesa de la izquierda colocaremos las setas con las formas más diversas, desde las Gasterales hasta las Hypocreales. Como siempre, tendremos la mesa de los Agaricus (champiñones), diferenciando los tóxicos de los comestibles, la mesa de las Novedades del año, las que exponemos por primera vez desde 1.990, año de la primera exposición, la mesa de las setas tóxicas, quizás la razón de ser de nuestras exposiciones, pues queremos incidir especialmente en la peligrosidad del consumo irresponsable de setas.
Y este año, como ya indicamos en la parte superior, tendremos un recuerdo muy especial para Carlos Barragán Lozano.
Texto de la placa en homenaje como socio de honor de la Sociedad Micológica de Pañeda:
A Carlos Barragán Lozano,
al profesor entrañable,
al mago más divertido,
al micólogo admirable,
al amigo.
Licenciado en Químicas por la Universidad de Oviedo, desarrolló su vida profesional en la firma La Asturiana, labor que compartió también con la docencia. Su mayor pasión fueron las setas. Una afición tardía que descubrió a través de unos compañeros de estudios del País Vasco. Ese hobby le llevó a fundar la Sociedad Micológica La Faya de Candás, integrada por 25 socios, que mantuvo una intensa actividad en los años ochenta. Era natural de Ujo. Socio de honor de la Sociedad Micológica de Pañeda, compartió con nosotros su bonhomía y buen humor desde la primera exposición en 1.990, siendo además maestro y colabolador entrañable hasta que su salud se lo permitió. Falleció en Candás, el 24 de Enero de 2.013. Legó a nuestra sociedad su importantísima colección de libros, revistas y material micológico.
Con nuestro especial agradecimiento a su esposa María Jesús
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